La exposición colectiva Mil Caras de Dulcinea (Sala La Lonja, Madrid) cuestiona los estereotipos de género, rompe con el mito de la mujer como musa de deseo […] visibiliza a la mujer como sujeto activo que […] reivindica a la mujer como protagonista de su vida, consciente de sus propias motivaciones, de ser ella misma…”

Wir wissen, dass wo immer es ist, es ist in der Nähe des Walder  es una propuesta específica para la exposición Mil Caras de Dulcinea, donde el ornamento remite a la intimidad más exclusiva del cuerpo femenino, cuya ausencia o presencia en el territorio de lo íntimo y personal nos hace plantear los límites entre lo privado y lo público, pero sobre todo, abre un diálogo cultural acerca de la libertad de decidir qué es mi intimidad como mujer, quién ha decidido que ésta sea, por qué.

El ornamento que caracteriza mi trabajo se muestra más femenino que nunca en esta pintura que muestra la delicadeza del cuerpo femenino presente en la intimidad, presencia y ausencia.